Hay cientos de quesos y miles de tartas de quesos y, a mí, me gustan todas. Soy adicta a las semifrías, porque es difícil que te dejen quedar mal. Como no necesitan horno, no hay riesgo de que se quemen o queden crudas; Se pueden (NO, se DEBEN) hacer el día antes de una celebración, lo cual es perfecto porque nunca me sobra tiempo cuando tengo invitados. Además, son frescas y parecen ligeras, aunque estén llenas de calorías, por eso todo el mundo las prueba. El único riesgo es que nos la carguemos al desmoldarla, pero con un molde de silicona, hasta a mí me ha salido perfecta.
Esta combinación de queso y chocolate blanco recuerda a una "panacotta", es suave y dulce.
INGREDIENTES.
- Medio litro de nata
- 1 terrina de queso philadelfia
- 1 vaso de leche entera
- 2 cucharadas soperas de azúcar
- 2 tabletas de chocolate blanco
- 1 sobre de cuajada
- Una plancha de bizcocho o varios sobaos.
ELABORACIÓN THERMOMIX:
Echar todos los ingredientes en el vaso y programar 8 minutos a 90º velocidad 4.
Vertemos en un molde de silicona y colocamos encima una capa fina de bizcocho o sobaos.
Dejamos enfriar para que cuaje.
Yo utilicé una base de bizcocho saboyano y la adorné con un enrejado de chocolate negro. También se puede utilizar un molde redondo desmontable, con una base de galletas y mantequilla o masa quebrada. Si queremos una versión más rápida, rellenaremos simplemente flaneras individuales con la crema.
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